Si compartes tu vida con un gato, lo más seguro es que tengas unas cuantas dudas sobre su alimentación. Algunas de las más frecuentes incluyen cuántas veces al día deberías llenarle el plato; si el pienso comercial, ¿es saludable para ellos?, o deberías optar por una dieta cruda y natural.

A continuación, exploraremos diferentes aspectos relacionados con la dieta de los gatos. De esta forma, podrás saber cómo satisfacer sus necesidades nutricionales para mantenerlo saludable a lo largo de su vida.

Tipos de alimentos: ¿qué darle a tu gato?

La opción más común es alimentar a nuestros gatos con pienso, el cual puede conseguirse en tiendas para mascotas o en supermercados. Estos alimentos comerciales están formulados para proporcionar a los mininos los nutrientes necesarios para una dieta equilibrada:

• Grasas
• Proteínas
• Minerales
• Vitaminas
• Carbohidratos

Además, muchas marcas ofrecen una variedad de opciones para diferentes etapas de la vida del felino, o con componentes especiales para alimentar a gatos enfermos. Si vas a darle a tu mascota este tipo de alimento, ten en cuenta que sea uno recomendado por profesionales de la salud animal. Además del pienso, es importante que combines su dieta con comida húmeda para que esté mejor hidratado.

¿Debes darle carne cruda a tu gato?

El gato es, por naturaleza, carnívoro. Un estudio publicado en la British Journal of Nutrition analizó la dieta de una colonia de gatos callejeros y descubrió que el 78 % de su alimentación estaba basada en mamíferos, seguido de un 16 % en aves. Esto sugiere que la dieta de los gatos, de manera natural, contiene un elevado contenido de proteínas y grasas. Por eso, puedes darle carne a tu gato, ya sea de res, de pollo o de pescado.

Sin embargo, quizá te preguntes si puedes darle carne cruda a tu gato. En este punto, existen discrepancias. Por un lado, una revisión sobre los problemas de salud asociados con la comida comercial ha popularizado la dieta BARF (acrónimo de Biologically Appropriate Raw Food, que significa «alimentos crudos biológicamente apropiados»).

Esta dieta consiste en darle a tu mascota alimentos no cocidos en una proporción de 80 % de huesos, carne y vísceras, y un 20 % de frutas que pueden comer los gatos, legumbres y vegetales.

Pero, por otro lado, diversas investigaciones, como la de la Universidad de Utrecht, señala que darle carne cruda a las mascotas, no solo no ofrece ningún beneficio, sino que puede exponerlos a parásitos y bacterias.

La clave está en consultar con tu veterinario de confianza. Después de todo, cada caso es particular y hay distintas maneras de alimentar a un gato según su etapa de vida, además de otros factores. Consulta con expertos en salud animal para que evalúe la edad y el peso del minino, así como si tiene necesidades dietéticas especiales o alguna condición de salud particular.

¿Qué no debe comer tu gato?

Los gatos pueden comer verduras como zanahorias o calabazas, pero no deberían ingerir otras como cebolla y ajo, o frutas como las uvas. Estos alimentos tóxicos para los felinos pueden ocasionarles malestar gastrointestinal, alergias o intoxicaciones. Tampoco debes brindarles chocolates, embutidos, alcohol, patatas crudas o verdes y nueces.

En cuanto a la leche, no es recomendable que se la administremos. Los gatos suelen ser intolerantes a la lactosa, por lo que la leche o el queso podría provocarles diarrea o vómitos.

¿Cada cuánto darle comida a tu gato?

Se aconseja dividir la alimentación diaria de los gatos en varias tomas (entre cinco y ocho). Cada una de ellas debe estar compuesta por una ración apropiada, según el tamaño del animal. De esta manera, podremos «engañar» a nuestro minino, haciéndole creer que siempre está comiendo, cuando en realidad consume cantidades adecuadas en intervalos regulares.

Evita llenar demasiado el plato para prevenir el aumento de peso y problemas de salud asociados, como complicaciones renales. Una vez más, consulta al veterinario de tu gato para saber las cantidades adecuadas, pues son diferentes en cada caso.

Otros consejos generales a la hora de alimentar a tu gato

Algunos consejos relacionados con la alimentación de tu gato que puedes tomar en cuenta son los siguientes:

• Cerciórate de que siempre tenga un plato con agua cerca. Cualquier gato debe mantenerse bien hidratado, y para ello necesita ingerir una media de 50 a 100 mililitros de agua por kilogramo de peso. Procura que su plato de agua esté lleno, limpio y con agua fresca.
• Varía la dieta. A los gatos les encanta comer de todo. Si decides alimentarlo con pienso comercial, incorpora productos como carne o pescado a veces. También puedes darle golosinas para felinos a modo de premio de vez en cuando.
• Observa su peso. Se considera que un gato tiene sobrepeso cuando supera entre un 1 y un 19 % su peso ideal, y es obeso cuando supera el 20 %. Esto se debe a una acumulación de grasas en su cuerpo. Vigila su estado de salud para saber si la comida que le das es buena para él.

Por último, sabemos que cada caso es un mundo. No es lo mismo alimentar a un gatito recién nacido o alimentar a un minino anciano, así como no tendrán los mismos requerimientos nutricionales los gatos adultos sanos que aquellos con condiciones médicas específicas.

Fuente: misanimales.com